La falta de oferta de viviendas y el alto coste que esta supone en las áreas urbanas han llevado a la gente a plantearse la opción de vivir en un local comercial. Pero esta alternativa nos enfrenta a cuestiones relevantes acerca de la viabilidad y legalidad. A continuación indagaremos profundamente en la posibilidad de transformar un local comercial en una vivienda y cuál es el proceso a seguir sin incumplir la legalidad.
En pocas palabras, en la opción de vivir en un local comercial influyen diferentes factores tanto legales como técnicos. Aunque se presenta como un remedio muy atractivo para afrontar los problemas de ubicación y coste de la vivienda, es imprescindible comprender la normativa y las exigencias concretas que presentan estas conversiones. Todos los locales comerciales no están comisionados para ser habitados, y convertirlo significa cumplir fielmente las normas sobre habitabilidad, seguridad y urbanismo.
¿Es legal vivir en un local comercial?
Si es legal o no vivir en un local comercial dependerá de la legislación municipal en España. En muchos casos, vivir en un local cuyo destino es el comercial no es legal a no ser que se efectúe un cambio de uso. Este cambio de uso tiene que ser aprobado por el Ayuntamiento y para que lo concedan se deben dar varios requisitos técnicos y urbanísticos.
En la mayoría de ciudades, los locales comerciales que encontramos no cumplen con los requisitos de habitabilidad exigidos para ser viviendas. Entre estos requisitos encontramos la ventilación, la posibilidad de poseer iluminación natural, salubridad, seguridad en caso de incendios y accesibilidad. Por lo que es importante, para poder habitar en un local comercial, adaptar la superficie a esos requisitos para poder obtener los permisos correspondientes.
Requisitos para vivir en un local comercial
Como hemos dicho, para vivir de forma legal en un local comercial se deben cumplir algunos requisitos que garanticen que el lugar es habitable y seguro. Aunque estos requisitos varían de un municipio a otro, por lo general entre ellos se encuentran los siguientes:
- Cambio de uso: Lo primero que debemos hacer es solicitar el cambio de uso de tipo local comercial a vivienda. Para obtener esto se deberá presentar un proyecto técnico efectuado por un arquitecto o aparejador y conseguir la licencia por parte del Ayuntamiento. Con este proyecto se le mostrará que el local posee los requisitos de habitabilidad correspondientes.
- Adaptaciones estructurales: Es posible que haya que efectuar obras en el interior del local para que se adapte a la normativa de vivienda. Entre las obras se pueden encontrar la instalación de baños y cocinas correctas, equipos de ventilación y calefacción, asegurar la accesibilidad y el aislamiento térmico y acústico.
- Cumplimiento de normativas: El local tiene que estar al corriente del cumplimiento de las normas de seguridad y habitabilidad. Esto quiere decir que tanto las normas contra incendios como las normas de eficiencia energética deben cumplirse y, por lo tanto, contar con alarmas de seguridad y salidas de emergencia.
- Inspección y certificación: Cuando se han terminado todas las adaptaciones se procederá a inspeccionar el local por parte de las autoridades municipales que son las encargadas de certificar que efectivamente se cumplen todos los requisitos. Una vez que la inspección se ha realizado y se ha comprobado que se cumplan los requisitos, se procederá al otorgamiento de la licencia de habitabilidad.
¿Me pueden multar por vivir en un local comercial?
La respuesta es sí. Habitar un local comercial en el que no se ha producido el cambio de uso y que no cuenta con los permisos requeridos, puede dar lugar a la interposición de multas y sanciones. La capacidad de interponer las multas y sanciones corresponde a la autoridad municipal, y estas serán interpuestas tanto a los propietarios como a los residentes de locales que se usan como viviendas sin autorización. También se podrá proceder al desalojo del lugar hasta que la situación esté regularizada.
La cuantía de las multas variará en función del municipio en el que nos encontramos y la gravedad de la infracción. En muchos casos además puede haber cargos extra por incumplir las normas de seguridad y habitabilidad. Por lo que es clave garantizar que tanto los permisos como las adaptaciones necesarias se cumplan antes de proceder a vivir en un local comercial.
¿Cuánto tarda un cambio de uso de local a vivienda?
El tiempo requerido para finalizar el procedimiento de cambio de uso de local a vivienda no es un tiempo fijo, sino que variará en función de diferentes factores, como la dificultad del proyecto y la eficacia de los procedimientos administrativos del municipio en el que nos encontremos. El tiempo, por lo tanto, puede variar entre unos meses y un año o más.
- Preparación del proyecto: Como hemos dicho, lo primero que debemos hacer es presentar un proyecto que esté firmado y elaborado por un arquitecto o un aparejador, y la confección de este proyecto tarda de varias semanas a meses dependiendo de la dificultad de las adaptaciones que sean necesarias.
- Solicitud y aprobación de la licencia: Presentar la mencionada solicitud y conseguir por parte del Ayuntamiento la aprobación no es un proceso corto. Las autoridades deberán revisar el proyecto presentado y esto les puede ocupar semanas y varios meses.
- Realización de las obras: Cuando se haya obtenido la licencia comenzará el momento de realizar las obras de adaptación. La duración de las obras dependerá de la magnitud de las mismas y de las modificaciones que haya que realizar, aunque por norma general serán varios meses.
- Inspección final y obtención de la licencia de habitabilidad: Al finalizar las obras, las autoridades municipales revisarán de nuevo el local y se asegurarán de que efectivamente cumple la normativa. Si el resultado de esa inspección es favorable, obtendremos la licencia de habitabilidad y podrá usarse el local como una vivienda de forma legal.
Resumidamente, transformar un local comercial en una vivienda es un procedimiento que debe ser planificado con sumo cuidado y en el que se deben considerar y cumplir una serie de normas, por lo que es imprescindible que tengamos paciencia para afrontar todos los procedimientos administrativos. A pesar de que es un remedio factible y atractivo para muchas personas, es imprescindible recibir bien la información y prepararse para asumir las exigencias legales y técnicas que nos van a realizar.